Fe de etarras | plenus

Detrás de todo lo humano, existe un componente ridículo, frágil y amargo. El guion de Diego San José es una de las grandes bazas del largometraje, potenciado con líneas como: “Hace años en ETA se comía de la hostia” / "El IRA es nivel top” / "Tú quitas a España de la Historia y no existirían los gordos”.

Inteligente, humana y sensible. Fe de etarras era necesaria. La comedia de Cobeaga es el ejemplo perfecto para demostrar que el humor es la mejor forma de romper un tabú. El tándem de Cobeaga y San José ha cambiado mucho desde 2003, donde en Vaya Semanita (ETB), arriesgaban enormemente y con ETA aún activo.

Javier Cámara y Julián López son dos de los rostros destacados

Fe de etarras nos desplaza al mundial de Sudáfrica (2010), donde la selección española alzó la copa aun teniendo todo en su contra. Entonces, ETA estaba en medio del proceso de desarticulación, pero aún quedaban reductos que no estaban por la labor de dejar las armas. En un piso franco de una pequeña capital de provincia, se esconde un mediocre comando formado por un veterano que debe demostrar valentía (espectacular Javier Cámara), una pareja cuyo futuro dependerá del porvenir de la banda (Gorka Otxoa y Miren Ibarguren) y un antisistema de Chinchilla (Albacete), representado por Julián López.

“Yo soy español, español, español” Fe de etarras disparó la polémica. La nueva película del director y guionista Borja Cobeaga (Ocho apellidos vascos, El negociador) ha provocado miles de reacciones por la publicidad lanzada por Netflix. El director defiende la campaña de la plataforma de ‘streaming’: "A lo mejor Diego y yo logramos que dejemos de ser los autores de 'Ocho apellidos vascos'. Ahora seremos los de la lona”.

Paloma Lubillo

30/10/17